viernes, 29 de junio de 2012

Introducción a Radiohead



Mis admiradores me pidieron que reseñe otra banda, así que decidí empezar por esta bandita inglesa. "Ah, los depresivos!" -dirán algunos- "los de Creep!". Sí, los de Creep. Encasillar a una banda por su tema más famoso es un pecado que generalmente comete la gente que dice "escuchar de todo" y en realidad escuchan lo que salga en los 40 mejores videos de MTV. Pero también hay mucha gente que realmente sabe de música, que también minimizan a Radiohead. "Son snobs"-dicen-"sus canciones no me emocionan en absoluto". Por el contrario, los fans de Radioheadson de lo más insoportable que hay. "Radiohead es sólo para entendidos"-afirman-"La gente no entiende lo que significa Radiohead". 
Yo odio los prejuicios, así que diré lo que yo pienso: Radiohead es la mejor banda de la actualidad, y definitivamente de las grandes bandas de la historia. No creo haber escuchado todas las bandas actuales, pero de lo que conozco, es lo mejor. Algunos dirán Arcade Fire, otros dirán Arctic Monkeys, pero yo no lo dudo: ninguno de los grupos que podrían competirles se mantuvieron tanto tiempo en un nivel tan alto. Ciertamente la época dorada de Radiohead fue entre 1995 y 2000, pero no por eso dejaron de ser los mejores, y sus últimos lanzamientos siempre fueron de lo bueno a lo excelente. 
Tienen muchos puntos a favor: si bien empezaron como una mediocre banda de rock alternativo, pronto evolucionaron a terrenos más experimentales, coquetearon con la electrónica, fusionaron los dos paradigmas, luego probaron que también podían hacer música hermosa, y actualmente sacaron un disco donde reafirman nuevamente lo electrónico pero también ofrecen canciones más minimalistas. 
Como se ve, son muy variados. Siempre digo que hay tres tipos de bandas: las que se repiten siempre, las que son “variadas por etapas”, y las que son variadas dentro de los mismos discos. En el primer grupo se incluyen millones de grupos, algunos muy buenos y muchos intrascendentes. En el segundo grupo se alista RadioheadKing CrimsonPink Floyd y muchas otras grandes bandas, mientras que el tercero es un selecto grupo integrado solamente por Queen y los Beatles
Pero me fui del tema: la cuestión es que Radiohead es muy variado. Nunca encontrarás un disco de Radiohead que suene igual a otro. Sin embargo, lograron cosechar un estilo muy distintivo.



También son originales. No inventaron nada, pero a esta altura en un rock en el que todo está hecho, tomaron los viejos elementos y los utilizaron para producir música de la más alta calidad pero sin alejarse de la popularidad de las masas, y produciendo además un sonido realmente único. La música de Radiohead se puede definir con la palabra texturas. El sonido de la banda es increíblemente trabajado, inmaculado, y perfectamente arreglado. El sonido general puede variar de disco a disco. Algunas veces será rockero, otras floydiano, otras electrónico, otras etéreo, pero siempre tendrá algo interesante. Es que la música de Radiohead siempre está atravesada por distintos matices. Esa es la palabra clave: matices. No lo puedo definir muy bien, pero lo que puedo decir es que el trabajo en estudio de la banda es increíble en ese sentido. El sonido es siempre seductor: siempre hay algo interesante de escuchar. Ya sea con capas de teclados, con efectos electrónicos, con guitarras superpuestas, con loops, con ritmos esquizofrénicos de batería, con armonías vocales, la cuestión es que siempre habrá elementos nuevos que valen la pena escuchar. En ese sentido, es el polo opuesto a las bandas formulaicas de la actualidad. No, con Radiohead uno nunca sabe de qué manera va a estar arreglada la canción. Sólo sabe que cualquier arreglo será novedoso, original y pensado hasta el más mínimo detalle. No es una banda experimental en el sentido literal de la palabra, pero se las ingeniaron para combinar una búsqueda constante de nuevos recursos sin dejar de lado la composición. ¿El resultado? Una banda que atrae a la masa y, a la vez, es inquieta y busca expandir constantemente las fronteras.

Individuo por individuo, se destaca la figura de Thom Yorke. Thom es un genio, y es el alma de Radiohead. Él hace las letras y compone las canciones (aunque últimamente se nota un espíritu más comunitario). Como compositor, ha logrado hacer las mejores canciones de las últimas dos décadas, que no es poca cosa. No se destaca mucho haciendo rockers (aunque siguen siendo buenos), pero ha experimentado con muchos géneros, y casi todos le salieron bien. Música electrónica, funk, garage rock, baladas floydianas, acústicas y de piano, jazz dixie-land, rap (¡), música atmosférica a la Brian Eno, en fin, una variedad pasmosa. Sus piezas pueden ser tanto personales como reflexivas del mundo que nos rodea, y generalmente poseen una atmósfera única, sean del género que sean, y por si esto fuera poco, también es un gran compositor pop, con algunas melodías brillantes. Toca muy bien el piano (consultar Pyramid Song), pero su punto fuerte es la voz. El falsete de Thom es tan distintivo, que fue copiado por las miles de bandas que salieron luego del éxito de Ok Computer. Canta también muy bien los graves (consultar A Wolf At The Door), pero su estilo más distintivo es a la hora de los agudos, con un falsete celestial (escúchenlo en I Will y mueran tranquilos. 
El resto de la banda acompaña muy bien, con un buen bajista como Colin Greenwood, un guitarrista fenomenal como Jonny Greenwood, que otorga algunos riffs fantásticos y algunos efectos impresionantes (ejem, Just, ejem), un baterista brillante como Phil Selway, que a veces es muy infravalorado pero que puede tocar tanto de forma despiadada como en A Wolf At The Door, épica y etérea como su entrada en Pyramid Song, o puede tocar ritmos imposibles como en Reckoner o 15 Steps, y un Ed O’ Brien que es un buen guitarrista pero se destaca por ser el multi-instrumentista de la banda. 
Todos estos elementos combinados forman un sonido articulado, cohesivo y cuidadosamente producido, con un resultado avasallante. No podría definir exactamente la música de Radiohead, por el eclecticismo antes mencionado, pero se destaca en que siempre hay algo interesante para oír. Se podría decir que lo importante son las texturas: el sonido que los tipos generan, muy atmosférico, hace que cada escucha revele algún detalle nuevo del que no nos habíamos percatado antes. En las canciones de Radiohead pasan cosas todo el tiempo, todo está perfectamente planeado y ejecutado, dando lugar a discos generalmente memorables.
En fin, esta es una BANDAZA, con mayúsculas.

jueves, 28 de junio de 2012

Yellow submarine (1969) - The Beatles


Puntuación: 6+

Mejor tema: Hey bulldog

Tracklist
01. Yellow submarine
02. Only a northen song
03. All together now
04. Hey bulldog
05. It's all too much
06. All you need is love


Este híbrido es el soundtrack de la película homónima. Digo híbrido porque sólo tiene 4 canciones nuevas de los Beatles. El resto son 2 canciones ya aparecidas y viñetas de música clásica un poco "rara" de George Martin que no comentaré porque no estoy capacitado para ello. Los 2 temas que ya habían aparecido son la sobrevalorada Yellow Submarine, y el himno All You Need Is Love. Ahora, no es que los temas inéditos sean una maravilla que te hagan salir ya a comprar el disco. All Together Now es una canción de Paul que debe ser de las canciones menos pretenciosas y hechas más "en joda" de los Beatles. La letra es de un programa tipo Hi-5 o Lazy Town, o peor, de Dora la Exploradora. Es una canción para niños con una melodía tonta y una letra tonta. De las canciones más livianas que escuché en mi vida. Huelga decir que no es algo genial, pero es disfrutable, hay que tomarla como lo que es, una simple canción de diversión. George aporta sus dos temas más psicodélicos. Only A Northern Song es la mejor, no es brillante pero sí es muy buena con un muy buen órgano tipo iglesia, una gran performance vocal y una buena melodía. It's All Too Much es inferior, pero también es disfrutable por su estribillo que recién aparece al final y sus arreglos. Estas dos canciones están traspasadas, llenas, plagadas de cotillón psicodélico. Zumbidos, Trompetas, ruidos extraños y demás, lo cual a veces lo hace realmente cansador, pero se pueden disfrutar en su cierta medida. El verdadero clásico de este disco es Hey Bulldog, un recio hard-rock a la Cream que empieza con un sensacional riff de piano, antes de que entre la melodía filosa con esos geniales "You can talk to me" para devenir en el fantástico estribillo. Sólo este tema podría justificar el gasto de $60 (!) en su compra (realmente odio que hayan remasterizado los discos de los Beatles, le agregan $20 por un video documental de mierda), aunque tampoco lo recomiendo. Lo mejor es bajarte los temas por Internet. En fin, un disco que no aporta mucho pero tampoco lastima, un disco aceptable, un 6+.


martes, 19 de junio de 2012

Aquelarre (1972) - Aquelarre



Puntuación: 8-

Mejor tema: Movimiento

Tracklist
01. Canto
02. Yo seré el animal, vos serás mi dueño
03. Aventura en el árbol
04. Jugador, campos para luchar
05. Cantemos tu nombre
06. Movimiento



  Almendra se separa. Edelmiro emprende Color humano, Luis Alberto Pescado rabioso y Emilio del Guercio junto con Rodolfo García, Aquelarre. Mientras los otros dos grupos se dedican a hacer blues con más complejidad que la habitual o a, simplemente, hacer hard rock con tintes psicodélicos, Aquelarre emprende una propuesta interesante: rock progresivo, blues y algún elemento del pop, todo esto con un clavicordio rabioso, una guitarra muy distorsionada (no por nada a Starc le llaman “Bola de ruido”) y una base sólida, sin demasiados cambios desde la última grabación de Almendra.
  Hay unas cuantas anécdotas interesantes de Héctor para ser contadas. Una de ellas es, por ejemplo, que cuando él era todavía un don Nadie e iba con su guitarra a los bares, intentaba tocar pero como esos lugares estaba lleno de “estrellas” del rock de aquel momento, no daban lugar a que los novatos tocaran. Starc dice que era si no fuera por Pappo “estaría manejando taxis”. El Carpo, que era por entonces muy reconocido, hizo pasar al escenario a Bola de ruido e hizo que las estrellitas se queden boquiabiertas (una de las personas que no lo dejaban tocar, dicen –estamos hablando de la época de Almendra- era el mismo Emilio del Guercio). Otra es que el verdadero debut del grupo fue en el primer Buenos Aires rock, que tocaron todos en la misma agrupación pero todavía sin un nombre definido, y así hay más. Pero queremos hablar de los temas.


  Canto desde el fondo de las ruinas (o simplemente Canto) empieza con la guitarra distorsionada de Starc como protagonista ejecutando un genial riff. Las melodías, ese “¡No,no puede ser./No, no, no”, y el solo rápido son elementos que terminan de convencerme para dejar a este tema entre los highlights. El teclado se escucha bastante, pero en esta canción no es demasiado relevante.
  La calidad general disminuye bastante con el tema más pop del disco, Yo seré animal, vos serás mi dueño. Las melodías son pintorescas, los coros son lindos y los intermedios con la guitarra punteando son entretenidos, ¿¡pero porqué tan largo!? Las ideas se extienden mucho y la canción termina resultando aburrida.
  Aventura en el árbol es uno de los mejores temas del disco. Con todo el blues encima, comienza el punteo de Starc y una melodía de voz lenta y casi fúnebre. Pero como en todo blues zapado en alguna parte, lo mejor es la improvisación: al principio, Héctor improvisa lenta y tranquilamente, intercalándose con el teclado; hasta que llega el bajo de Emilio para dar un riff en el que se va sumando cada vez más volumen. González Neira toca como un maestro hasta que la guitarra explota en uno de los mejores y más sentimentales solos del disco. Los coros del estribillo dan por terminado el tema, pero no todo termina ahí. No entiendo por qué, nunca logré comprenderlo, pero cuando las voces quedan suspendidas, entran la guitarra y el teclado haciendo un riff totalmente desubicado y ajeno a cualquier elemento del tema. Vaya a saber qué se les habrá cruzado por la cabeza como para hacer eso.
  Un blues menos extenso pero tan bueno como el anterior llamado Jugador, campos para luchar se acerca con su genial melodía y su llevadero riff. La guitarra de Starc, nuevamente, se luce como ningún instrumento lo hace en el genial intermedio improvisado.
  Aparentemente lo pseudo-pop no es lo indicado para Aquelarre. En el pastoral Cantemos tu nombre suenan coros pacíficos, guitarras acústicas y melodías hermosas. ¿Pero cuál es el problema de esta canción? El mismo de Yo seré animal…: la repetición de las ideas musicales. ¡No se puede hacer un tema de 5 minutos y medio con sólo dos melodías que encima son así de calmas! Lo mejor, tal vez, sea cuando aparece la limpia guitarra eléctrica a puntear improvisadamente, al final.
  Ok, si no nos habíamos quedado conformes antes, escuchen Movimiento. ¡Este si que es un tema! Es una perfecta combinación entre riffs perfectos, melodías urbanas, guitarras distorsionadas, clavicordios desenfrenados y otras guitarras que suenan tirando pequeños punteos cargadísimos de wah-wah. Es también, para mi, uno de los temas más infravalorados del disco. Diría que es casi bailable. ¡Esuchen esas melodías y esos pequeños solos entre estrofas! Otra cosa fascinante es el riff final, cuando todos los instrumentos se abalanzan como si de un terremoto se tratara. ¡Así me gusta Aquelarre!

  Algo que olvidé destacar de los músicos es la voz de Emilio: amo como canta. Su voz me resulta muy natural y errante, con un tono perfecto para interpretar canciones al estilo rockero-blusero de Movimiento o para sonar pacífico, como en Cantemos tu nombre.
  No hay ninguna letra demasiado destacable en el disco. La mejor me parece la de Cantemos tu nombre, con todas esas referencias a la naturaleza y a la paz, pero tampoco se destaca del todo.