martes, 10 de julio de 2012

Almendra II (1970) - Almendra


Puntuación: 8

Mejor tema: Para ir

Tracklist:
01. Toma el tren hacia el sur
02. Jingle
03. No tengo idea
04. Camino difícil
05. Rutas argentinas
06. Vete de mí, cuervo negro
07. Aire de amor
08. Mestizo
09. Agnus dei
10. Para ir
11. Parvas
12. Cometa azul
13. Florecen los nardos
14. Carmen
15. Obertura
16. Amor de aire
17. Verde llano
18. Leves instrucciones
19. Los elefantes
20. Un pájaro te sostiene
21. En las cúpulas



Para el segundo y último disco de la agrupación, el sonido cambia completamente. Pareciera que Spinetta había logrado una especie de revolución en el rock nacional con su primer disco, y viendo que ya este objetivo estaba cumplido, se planteó otros totalmente distintos para este segundo álbum. 
Almendra fue casi una explosión furtiva que apareció de la nada y luego se disolvió con la misma rapidez. Con el primer disco parecía que la banda tenía mucho más para dar, y sin embargo se dieron ciertos problemas que impidieron que este grupo se desarrolle seriamente. En primer lugar, al Flaco se le ocurrió el proyecto de hacer una ambiciosa ópera rock que luego terminaron abortando. Entonces terminaron haciendo este disco doble repleto de canciones en el que pareciera que Spinetta se desliga un poco del asunto. Me da la impresión de que pensó : "bueno, la revolución ya está hecha, ahora voy a hacer algo más común y a divertirme". Esto también provocó una apertura en la escritura de los temas, ya que tanto Emilio del Güercio y Edelmiro Molinari aprovecharon para componer sus primeras canciones y terminaron escribiendo casi la mitad del disco. En consecuencia, es un disco sin pretensiones, donde se nota a la banda muy liberada y haciendo lo que se le venía a la cabeza. 
El sonido del grupo cambia también abruptamente. El primer disco de Almendra era una especie de pop-rock refinado y elegante, surrealista y con influencias jazzeras. Pues bien, si uno escucha este segundo volumen prácticamente no podría reconocer a la misma banda del álbum anterior. El estilo predominante aquí es el blues-rock, algo completamente en las antípodas. Hay por ahí un par de temas bastante progresivos, largas improvisaciones y cancioncitas acústicas, pero básicamente es un disco de blues-rock, con riffs filosos, guitarras duras y solos extensos. Por cierto, uno de los puntos bajos del disco, en mi opinión, es el hecho de que muchas canciones poseen grandes riffs, pero luego no consiguen desarrollarlos bien o los repiten hasta el cansancio, sin terminar de conformar una gran canción. Spinetta se nota influenciado por la aparición de Led Zeppelin, y esto se vería profundizado en Spinettalandia y sus Amigos y más tarde también en Pescado Rabioso
Es obvio que Almendra 2 no es ni la mitad de bueno que Almendra. Si bien es cierto que continuar ese nivel era muy difícil, es verdad que la banda retrocede en un año de hacer una obra maestra a hacer un buen disco y poco más. De todos modos, creo que no es para nada criticable. Un año atrás, era necesario un disco cuasi perfecto como Almendra, que amplíe las fronteras del rock en castellano. Luego de eso, es lógico que la banda decida relajarse. El hecho de que Emilio y Edelmiro contribuyan en gran cantidad en la realización del álbum, sumado a la duración del disco y, por lo tanto, a la cantidad de relleno que hay en él, todo esto hace que sea obvia una curva descendente en el nivel del grupo. 
Pero dejando de lado las comparaciones, sigue siendo un buen disco. El estilo es algo monótono, y además hay mucho relleno, pero contrastando con eso tenemos algunas joyas realmente memorables, y como no hay ninguna canción realmente mala, puede alcanzar un 8 sin problemas. 
Vamos a los temas. El disco tiene un gran comienzo con Toma El Tren Hacia El Sur, una canción algo extraña que comienza con una percusión algo indígena que acompaña la divertida letra del Flaco, y que además cuenta con un gran estribillo. No obstante, lo mejor es la extensa sección rockera del final, con un solo antológico y brillante de guitarra. La letra expresa el típico ideal de los hippies argentinos de la época, que creían en la Patagonia como un paraíso donde poder vivir todos juntos y en paz.
Luego tenemos uno de los muchos temas cortos que pueblan el álbum. En este caso se trata de Jingle, una especie de balada con una melodía tierna e inocente. Lindo.
A continuación llega No Tengo Idea, un ejemplo de lo que decía en la introducción, ya que tiene un riff rápido realmente genial pero no logra seducirme como canción, porque dura muy poco y además no me termina de convencer la manera de cantar de Edelmiro. De todas maneras es un tema disfrutable, con una destacada sección de bajo en el medio y una letra bastante extraña. 
Camino Difícil es otra de esas baladitas cortas, sólo que esta vez la melodía realmente tiene un aura de nostalgia y misterio que logra emocionarme, por lo que se gana el puesto de highlight.
Después viene la canción más conocida del disco, Rutas Argentinas, un verdadero himno del hippismo y los jóvenes mochileros de la época. Se trata de un típico blues-rock muy pegadizo, con una gran melodía y un solo sensacional de guitarra.
Vete De Mí, Cuervo Negro, es una canción acústica muy corta en la que Spinetta exorciza sus males a través de una melodía bohemia, una letra genial. y unos acordes desaliñados de guitarra. 
Aire De Amor es otro típico rocker del disco, con un buen riff y no mucho más que eso. Lo que más disfruto del tema es cómo se desvanece la guitarra eléctrica del final.
Bajo el mismo estilo que el tema anterior tenemos a Mestizo, un rock algo lento que esta vez posee un estribillo genial, una gran letra y un medido solo de guitarra.
Para contrarrestar todos estos temas cortos tenemos un verdadero mastodonte de 14 minutos llamado Agnus Dei. La canción en sí dura apenas un minuto y pico, y le alcanza para ser sensacional. Ya el comienzo de "Ana lloró / Gustavo se fue al suelo" indica grandiosidad, y luego aparece una masa preciosa de clavicordios que nos hacen prorrumpir en lágrimas. Nótese también la apocalíptica marcha de la batería de fondo. Esta primera parte era perfecta con tan sólo un minuto de duración, y la segunda parte del tema consiste en trece minutos ininterrumpidos de improvisación bien rockera, con una batería desbocada, un bajo obsesivo que martilla y martilla notas y algunos solos memorables de guitarra. El nivel instrumental es excelente, pero la duración desmedida hacen que generalmente me aburra un poco escuchándolo. Esto hace que la canción pierda algo de peso, pero no deja de ser un jam ajustadísimo que merece todos los elogios del mundo. 
Terminando el primer disco tenemos la mejor canción del disco, y una de las más hermosas jamás compuestas por Spinetta. Alejándose de todo el blues-rock del disco, el Flaco nos entrega una pieza bellísima y maravillosamente emotiva llamadaPara Ir. Se trata de una balada mínima, casi sin percusión, con apenas una guitarra tirando algunas notas, y que aún así logra insertarnos en una atmósfera espiritual, romántica, etérea y volátil. Spinetta canta de manera preciosa una melodía ídem, tan elegante que asusta, y termina de redondear una canción perfecta. Una de esas canciones que tienen el poder de detener el tiempo, que mientras uno las escucha pierde toda noción de lo exterior y vive un verdadero mantra emocional del que no puede salir hasta que termina. La letra también es hermosa, con una referencia a Muchacha en ese "Quiero que sepan hoy qué color es
el que robé cuando dormías
", e imágenes brillantes por doquier (¡cómo amo ese "Descálzate en el aire"!). Una manifestación sublime de puro amor. 
El disco dos empieza con una durísima canción llamada Parvas, que posee un riff zeppeliano, furioso y brillante, algunas secciones ensoñadoras y silenciosas por el medio que luego son cortadas por quiebres filosos de guitarra eléctrica, y una voz bastante aguda y atípica para un rock así. Muy buen tema.
Cometa Azul es una canción no muy destacable, con un buen riff y un ritmo algo funkie que se extiende demasiado para mi gusto.
Luego llega Florecen Los Nardos, una especie de híbrido entre balada y rocker. En rigor es una balada, ya que comienza con unas líneas evocadoras y orgánicas de guitarra, y termina con Spinetta cantando una melodía triste acompañado por la misma melancólica guitarra, sólo que en el medio se produce un marcado quiebre rockero en el que se repite el mismo riff durante 4 minutos. Es un muy buen riff, pero se hace muy cansador con el tiempo, por lo que esta sección no se me antoja muy disfrutable. 
Luego tenemos un pequeño segmento acústico que comienza con Carmen, una simple balada acústica con algunos aires campestres.
Después tenemos Obertura, un instrumental inspirado en Overture, de los Who, que es la única pieza que sobrevivió al fallido intento de ópera rock de Almendra. No me atrae mucho, ya que me recuerda al soundtrack barato de alguna vieja película clase B, pero es un intento disfrutable. Por cierto, es verdaderamente extraño que un tema llamado Obertura se encuentre ubicado en el número 5 del segundo disco, ¿no?
Terminando este segmento tenemos un típico blues acústico como Amor De Aire, bien pantanoso y arrabalero, con una letra sencilla acerca de una mujer del campo que se va a vivir a la ciudad y se enamora. Uno se puede imaginar fácilmente a los granjeros de Missouri cantando esto al borde del río Mississipi. 
Luego viene una verdadera incongruencia como Verde Llano, un extraño tema muy cortito que comienza como una simple viñeta cómica con silbidos y una melodía pegadiza que parece sacada de algún dibujito, y luego se transforma en la misma melodía pero tocada aceleradamente y con guitarra, que mi hermana definió como "del lejano oeste" (tiene 9 años, aclaro). En fin, me encanta esta cancioncita, tan alegre y rimbombante, despreocupada como ninguna.
Leves Instrucciones es otra canción corta, pero esta vez se trata de una solemne balada de piano acompañada de una triste melodía y una letra extremadamente surrealista. 
El último intento largo del disco se titula Los Elefantes. Se trata de una canción algo extraña, una especie de balada progresiva que tiene líneas brillantes de guitarra por doquier y una melodía genial y adormecida que se acelera majestuosamente en el estribillo. Realmente amo esos gemidos que tira la guitarra por todos lados, tan psicodélicos y a la vez apacibles, tan nostálgicos. Un temazo por donde se lo mire.
El disco va cerrando con otro rocker como Un Pájaro Te Sostiene, que comienza con un riff sensacional y en el medio muta inesperadamente a una balada infinitamente triste de piano. ¡Por dios! ¡Esa frase! "Cada vez que tú no estás / La música parece que muriera un poco más". Es majestuoso. Luego regresa el riff y todo termina tan rockero como había comenzado. 
El último tema del álbum se llama En Las Cúpulas, y es realmente innecesario. Es una canción muy difícil de encasillar, sigue el estilo que se notó en todo el disco, algo de blues-rock mezclado con melodías surrealistas, solo que esta vez no hay realmente nada interesante en la sección instrumental ni en la canción en sí. Bastante aburrido para cerrar el álbum.
Y así termina este disco. No es un gran disco, pero con los buenos temas que tiene le alcanza para un merecido 8-.